Gestión del Talento. Fácil, fácil.

Los de RH, nos llenamos mucho la boca con la Gestión del Talento, que si el talento por aquí, el talento por allá, desarrollar el talento, desarrollar el potencial….coaching para el desarrollo del talento. ¿En fin para qué te voy a contar? Seguro que nos has escuchado con esta cantinela pero ¿sabes una cosa en serio? Es muy importante. Tremendamente importante. Ahora y cada vez más los trabajos que realizamos tienen menos de automatismo y más de creatividad, menos de repetir lo que hacíamos ayer y más de innovar para ajustarnos y avanzarnos a las necesidades de unos clientes tremendamente exigentes. Todos estamos en una rueda que parece que no tiene fin, personalmente creo que no la tiene. Puesto que cada vez más el entorno profesional es incierto, necesitamos profesionales que puedan desenvolverse bien en contextos poco o nada estructurados, pesonas que sobre una base de perícia, la que sea, puedan generar nuevos aprendizajes llenos de utilidad y conectados a unos resultados que frecuentemente tampoco tenemos formulas para alcanzar. Aquí toma su relevancia el talento y el potencial. Creo que todas las personas, por lo bajo tenemos un talento o pericia única que nos pertenece, aunque no todos tengamos el interés en desarrollarla a nuestro máximo potencial. Podemos ser buenos futbolistas pero seguramente no estaremos dispuestos a entrenar como los nº1 mundiales para tener su mismo nivel. Así, si el talento es la pericia que tenemos y es significativamente mejor que otras personas; consideramos el potencial como la habilidad para:

• Aprender del pasado e influir en el futuro

• Tener la energía y motivación necesarias

• Mantener el compromiso a largo plazo y en conexión con el proyecto o idea empresarial.

En la gestión de personas, este talento lo “traducimos” en modelos de competencia que sean importantes para la empresa según su momento, su producto y mercado, etc. Avanzar hacia modelos de competencias compartidos con los equipos, dónde podamos comparar nuestro desempeño con estándares elevados de desarrollo, dónde podamos reconocer los avances y las mejoras de las personas; nos proporciona un proceso ordenado  e inducido de progresión profesional y nos ayuda a fortalecerlas habilidades que serán mejor valoradas por nuestros clientes a largo plazo. Llevar a la gestión del talento a modelos de gestión competencial ayuda a nuestros directivos a ejercer una influencia positiva en los equipos a la vez que les facilita herramientas concretas para hacer crecer a las personas. En este vídeo te cuento más sobre gestión del talento. Espero que te ayude para desarrollar a tu equipo.   Un saludo Toni